En el contexto de la salud mental en los adultos mayores, cultivar una mentalidad positiva, desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas y mantenerse socialmente activo pueden ser prácticas especialmente beneficiosas. Al invertir tiempo y esfuerzo en fortalecer nuestra salud mental a lo largo de nuestra vida, estamos sentando las bases para un envejecimiento más saludable y gratificante.
Un estudio realizado en 2021 por la Universidad CES de Medellín, aplicado en cinco ciudades de Colombia: Medellín, Bucaramanga, Pereira, Popayán y Santa Marta, reveló que el 44,2% de los adultos mayores tiene conducta suicida debido a un preocupante deterioro en la salud mental de dicha población.
De esta manera, cuidar la salud mental en los adultos mayores es esencial por varias razones fundamentales: en primer lugar, la salud mental influye directamente en la calidad de vida y el bienestar general de una persona en esta etapa de su existencia; un estado mental positivo puede ayudar a mantener relaciones sociales activas, fomentar la autonomía y la independencia, y mejorar la capacidad para hacer frente a los desafíos y cambios propios del envejecimiento. Además, una buena salud mental puede ser crucial para prevenir o manejar enfermedades físicas comunes en la vejez, ya que está estrechamente relacionada con hábitos saludables y la adherencia a tratamientos médicos.
En resumen, cuidar la salud mental en la tercera edad es esencial para promover el bienestar integral y la calidad de vida. Es un proceso continuo que requiere atención y dedicación, pero los beneficios a largo plazo son invaluables. Al cultivar desde ahora el viejo que deseamos ser, estamos dando pasos significativos hacia un envejecimiento activo, satisfactorio y pleno, en el que podamos disfrutar de cada etapa de la vida con vitalidad y serenidad.
