Jaramillo Guzmán expresó que recientemente, en el Comité Nacional de Cafeteros, se estableció un «precio disparador», es decir, el umbral a partir del cual los caficultores comienzan a recibir compensaciones, el cual fue fijado en $1.280.000 pesos por carga de café, cifra que genera descontento entre los productores del varias zonas país, principalmente del centro, quienes manifiestan que esta cifra no cubre los costos de producción.
Las tensiones se intensifican con el anuncio de un plantón por parte de Dignidad Cafetera, programado para el 17 de abril en el municipio de La Pintada, Antioquia. Las peticiones de los caficultores incluyen, entre otras, acceso a créditos, alivio de deudas y reformas en las estructuras del gremio, afirmó el director ejecutivo.
De otro lado, el presidente de la República, Gustavo Petro Urrego, ha manifestado sus diferencias con directivos del gremio a través de sus redes sociales y en diferentes espacios públicos, pero en ningún momento ha propiciado un espacio de comunicación directa para revisar las diferencias y buscar alternativas de solución para las comunidades cafeteras del país.
Recordemos que en Antioquia, 94 de los 125 municipios tienen producción de café registrada que sustentan a más de 80 mil familias y abarcan más de 110 mil hectáreas sembradas con el grano.